
El Papa Francisco emitió una regla que exige "que todos los funcionarios informen a sus superiores sobre las acusaciones de abuso o los intentos de encubrirlas".
Qué ceguera, Señor, la mía. Qué soberbia disfrazada de virtud.
General02/03/2025 José María R. Olaizola SJLa viga en el ojo
¿Quién me nombró juez de mis hermanos?
¿Quién me convirtió en perseguidor implacable, dispuesto a señalar cada falta,
cada error, y cada carencia?
¿Cuándo me otorgaron el poder de condenar?
¿En qué espejo de extraña perfección creí reconocerme, para señalar, con dureza los fallos ajenos?
Qué ceguera, Señor, la mía. Qué soberbia disfrazada de virtud.
Qué dureza revestida de méritos.
Qué inconsciencia sobre mis pies de barro.
Ayúdame a evitar veredictos y sentencias, y que sepa dejarte a ti ser Juez y Padre de todos.
El Papa Francisco emitió una regla que exige "que todos los funcionarios informen a sus superiores sobre las acusaciones de abuso o los intentos de encubrirlas".
Una institución que en 28 años logró alcanzar sus objetivos sociales, sosteniendo la espiritualidad de nuestra Santa Mama Antula.
En el 470 Aniversario de la Ciudad de Santiago del Estero. MAMA ANTULA SANTIAGOMANTA
"Deseamos constituir una Comunidad de Benefactores, tan grande, que nos permita soñar en obras que mejoren la vida de las personas" Rubén Valdez
En el marco del Primer Encuentro Nacional de Propagadores de la vida y obra de Mama Antula
Una devoción que Mama Antula engrandeció en Argentina
"...vengo a ustedes como un hermano que quiere hacerse siervo de su fe y de su alegría, caminando con ustedes por el camino del amor de Dios, que nos quiere a todos unidos en una única familia".
El cristiano está llamado también a vivir sanando esta cultura. No es lo mismo ganar dinero sin escrúpulo alguno que desempeñar honradamente un servicio público, ni es igual dar gritos a favor del terrorismo que defender los derechos de cada persona.
Sólo un amor comprometido como fuerza lógica y mancomunada puede contrarrestar la sin-razón de un proyecto odio-violencia.
Bendecir es aprender a vivir desde una actitud básica de amor a la vida y a las personas. El que bendice vacía su corazón de otras actitudes poco sanas como la agresividad, el miedo, la hostilidad o la indiferencia.
La verdad de Dios genera en nosotros un estilo de vida nuevo, enfrentado al estilo de vida que brota de la mentira y el egoísmo.