
Mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida.
Lecturas de hoy Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo - Ciclo A Domingo, 11 de junio de 2023
Lecturas de hoy Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo - Ciclo A Domingo, 11 de junio de 2023
Lecturas de hoy Bautismo del Señor - Ciclo A Domingo, 8 de enero de 2023
Lecturas de hoy Santa María Madre de Dios Domingo, 1 de enero de 2023
Lecturas de hoy Domingo 4º de Adviento - Ciclo A Domingo, 18 de diciembre de 2022
Lecturas de hoy Domingo 32º del Tiempo Ordinario - Ciclo C Domingo, 6 de noviembre de 2022
Lecturas de hoy Domingo 31º del Tiempo Ordinario - Ciclo C Domingo, 30 de octubre de 2022
Lecturas de hoy Domingo 27º del Tiempo Ordinario - Ciclo C Domingo, 2 de octubre de 2022
Queremos arder como vos, Jesús, dar calor, iluminar, guiar, y encender!. Jesús, no nos dejes en paz, encendenos, que queremos ser felices en la mesa larga con vos.
Lecturas de hoy Domingo 16º del Tiempo Ordinario - Ciclo C Domingo, 17 de julio de 2022
Lecturas del Domingo 13º del Tiempo Ordinario - Ciclo C Domingo, 26 de junio de 2022
¿Soy consciente que Él está conmigo cada día? ¿Siento sus pasos junto a los míos? ¿Lo experimento a mi lado, sobre todo en mis bajones y oscuridades? ¡Creámoslo! ¡Él no nos puede abandonar, nos ama!
Lecturas del Ascensión del Señor - Ciclo C Domingo, 29 de mayo de 2022
Para adorar el misterio de un «Dios crucificado» no basta celebrar la Semana Santa; es necesario además acercarnos más a los crucificados, semana tras semana.
Dejemos que Jesús camine esta semana santa junto a nosotros, hagamos que nuestra Jerusalén se transforme en espacio de Salvació.
La economía de Dios no mata, no descarta, no aplasta; es humilde, fiel a la tierra” … este fue el mensaje del Papa Francisco el Viernes Santo, entonces si la economía de Dios no mata, no descarta, ¿qué hace la economía neoliberal?, ¿qué espíritu lo mueve? ...cabe el planteo ético social cristiano de ¿se puede ser cristiano y neoliberal?
Hay lugar cierto para el amor político. Hombres y mujeres que hacen propia la fragilidad de los demás, que no dejan que se erija una sociedad de exclusión, sino que levantan y rehabilitan al caído para que el bien sea común.
Los pequeños abusos que podamos padecer, las injusticias, rechazos o incomprensiones que podamos sufrir, son heridas que un día cicatrizarán para siempre. Hemos de aprender a mirar con más fe las cicatrices del Resucitado.