
Su aparición con la bula papal Dum Diversas, emitida por el papa Nicolás V el 18 de junio de 1452 a Alfonso V de Portugal para validar su apropiación de regiones en África occidental.
La identidad que nos hermada y nos cobija en las faldas de nuestra "matria" o "patria" grandísima.
Mundo - Latinoamerica07/11/2020
Magis ComunicaciónLa escritura nos sitúa en un lugar, tan preciso que puede localizarse y definirse como "el aquí", pero el estar aquí supone "una manera de estar y una manera de ser", una identidad. En el noroeste de la Argentina, en Santiago del Estero, nos situamos como parte de la columna vertebral andina, en un todo latinoamericano.
Nuestra identidad cultural, en los modos de relacionarnos con las deidades (Tata Yaya), la naturaleza (Pachamama), nuestro lenguaje fraterno, en las danzas, la música, el arte culinario, nos permiten reflejarnos y observarnos hijos todos, universalizandonos desde esta aldea común.
Latinoamerica rica en religiosidades, cultura, arte, música, danza, recursos minerales, con una naturaleza rica por doquier, sólo requiere una distribución genuina de sus riquezas, una revalorización de su patrimonio (tenemos semillas únicas), y una denuncia permanente por los daños de los "capitalistas y mercantilistas" en sus "agronegocios".
Desde este lugar podemos decir: No podrán comprar la vida, el aire...no podrán comprar el sol!.

Su aparición con la bula papal Dum Diversas, emitida por el papa Nicolás V el 18 de junio de 1452 a Alfonso V de Portugal para validar su apropiación de regiones en África occidental.

Extraído del periódico católico oficial de la Arquidiócesis de Monterrey, una editorial realizada con una rica conceptualización.

Mons. Romero se ha convertido en un símbolo de la lucha por la justicia y los derechos humanos en América Latina y en todo el mundo.


El diálogo y la concertación para el desarrollo y bienestar de los pueblos.

"Un rostro que se desdibuja, pero que es signo de la gracia de Dios, en una comunidad que reza el rosario"

...nada hay más urgente y decisivo para los cristianos que poner a Jesús en el centro del cristianismo, es decir, en el centro de nuestras comunidades y nuestros corazones.

Para vivir de manera agradecida es necesario reconocer la vida como buena; mirar el mundo con amor y simpatía; limpiar la mirada cargada de negativismo, pesimismo o indiferencia para apreciar lo que hay de bueno, hermoso y admirable en las personas y en las cosas.

"La familia es el primer espacio de contención, de escucha, de ternura. Es allí donde aprendemos a compartir, a cuidar, a resistir juntos",

Los pobres no están abandonados a su suerte. Dios no es sordo a sus gritos. Está permitida la esperanza. Su intervención final es segura.

...cuando se vean rechazados por la sociedad, sapan que Dios los acoge; cuando nadie les perdone su indignidad, sientan el perdón inagotable de Dios. No lo merecen. No lo merecemos nadie. Pero Dios es así: amor y perdón.